Mi papá y mi mamá estaban a mi lado cuando vino esa señora y me tomó en brazos;
Dijo “que lindo es este perrito” y me alejó para siempre de mi familia. Yo solo quería llorar y llorar y no tenía hambre y mi pena de no ver a mi mamá sobre todo, me consumía día a día………Cuando el sueño me venció, vi a mis padres de nuevo venir hacia mi corriendo y también a mis hermanos…….era una tarde de sol y el verde del campo se reflejaba en todas las cosas, los árboles, tan altos, las pequeñas florcitas, tan brillantes, todo era hermoso y yo era de nuevo feliz………de pronto desperté y a mi lado no había mas que un chamanto y un tazón de agua. Lloré hasta reventarme ese día, pero luego llegó la señora –ahora mi ama - muy amorosa me acunó y me dio rica comida y luego me dormí otra vez, pero ahora soñaba cosas terribles; me perseguía un enorme perro de grandes patas y hocico gigante……el tiempo y los mimos de los niños y la señora me fueron consolando hasta que conocí a Margie, la perrita mas encantadora que habían visto mis ojos. Hoy comparto mi casita con ella y unos pequeñines que nacieron de esta unión…..y son mis mas grandes admiradores.
Soy feliz de nuevo, pero he tenido que hacer mi vida separado de mis papás, a quienes tanto quiero. Sin embargo, con Margie , jugamos y corremos todo el día; ya en la noche, nos acostamos juntos y soñamos con nuestros respectivos padres, que en algún lugar del cosmos, nos están mirando.
Penny
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